Nuestro cuerpo necesita diariamente alrededor de 30 vitaminas y minerales clave, normalmente llamados micronutrientes, para mantener todas las funciones del cuerpo.
Existen dos tipos de vitaminas: las solubles en agua (hidrosolubles) y las solubles en grasa (liposolubles). Las vitaminas solubles como la vitamina C, beta caroteno, el ácido fólico (B9) y otras vitaminas del grupo B, deben consumirse diariamente porque no son almacenadas en nuestro cuerpo. Cualquier exceso es eliminado vía urinaria. La vitamina B12 es la única vitamina hidrosoluble que el cuerpo almacena en el hígado, principalmente.
Las vitaminas liposolubles permiten a nuestro cuerpo:
– Producir y lanzar energía
– Construir proteínas y células
– Generar colágeno
Nuestro cuerpo puede almacenar el exceso de vitaminas liposolubles en nuestro hígado y tejidos grasos. Por lo que podemos espaciar un poco más su consumo (aunque es recomendable también consumirlas diariamente). Estas vitaminas son: la vitamina A, la D, la E y la K. Las vitaminas liposolubles permiten:
– Construir huesos fuertes
– Mantener la salud visual
– Proteger nuestro cuerpo sirviendo como antioxidantes
– Interactuar con otras vitaminas, facilitando su absorción.
Los minerales también son almacenados en nuestro cuerpo, como el Calcio en nuestros huesos. Nuestro cuerpo absorbe los minerales que necesita y excreta su exceso. Nuestro organismo almacena minerales principalmente para labores estructurales y metabólicas mientras que las vitaminas son almacenadas como reservas de nutrientes.
Las vitaminas y los minerales normalmente interactúan de forma positiva, trabajando en unión para favorecer una adecuada absorción. La vitamina D, por ejemplo, promueve la adecuada absorción de Calcio alimenticio. La vitamina C por su parte, asegura una buena absorción de hierro.
Para asegurar un correcto aporte de micronutrientes en Otoño, te recomendamos consumir diariamente las fuentes alimentarias propuestas en la infografía que te dejamos. La naturaleza es sabia y nos ofrece en cada estación, los alimentos más adecuados para cubrir las necesidades particulares de cada época del año. En otoño, por ejemplo, es importante reforzar nuestro sistema inmunitario de cara al invierno así como activar nuestras vías depurativas tras el verano (épocas que normalmente se caracteriza por excesos y desajuste horario).
Podemos reforzar también nuestra dieta, a través de productos que combinan vitaminas, minerales y antioxidantes como este Zumo Antioxidante de frutas rojas y cítricos, preparado para ayudar a nuestras defensas cada mañana.
